Excálibur sigue oxidada en la roca esperando a que alguien se decida a sacarla, pero la gente pasa de largo...
6/21/2006
LA PARADOJA DE LA MENTIRA
Kane se cree sus propias mentiras. Siembra bulos en su mente que transmiten las neuronas a través del eco de la incertidumbre. Kane se miente a sí mismo, por lo que se ve obligado a comprobar cada dato que recoge su cráneo. Kane reflexiona y llega a la conclusión de una nueva certeza que le siembra de dudas. Vive en una eterna paradoja: Soy un mentiroso. Y se pregunta si dice la verdad o se trata de otra mentira.
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