10/08/2015

VÍDEO Y RELATO

Este vídeo sobre los efectos de la música en el Alzheimer me ha recordado a este otro viejo relato:



VIEJOS AMORES 

El abuelo lloraba descorazonado en la azotea con un portarretratos en sus manos.
-¡Alto, no se tire! -gritaba el enfermero del geriátrico mientras intentaba agarrarle por un tobillo.
-¿Dónde está ella? -repetía una y otra vez el anciano mientras miraba la foto. Allí estaba él, de joven, junto a aquella chica del disfraz, tan bella y tan menuda, con aquellas alas brillantes.
-Vuelva a entrar, abuelo, aquí fuera hace frío.
-El anciano saltó al vacío, extendió los brazos y una anciana con las alas arrugadas le agarró de la mano.
-Cuanto tiempo, Peter, te has hecho viejo -le susurró al oído.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esos viejos amores son pasajeros, con el tiempo se olvidan, y después vuelven sin aviso.
Campanilla

Anónimo dijo...

ay, los viejos amores. Tus micros son tan buenos

Un abrazo