La ayudante de Houdini sale radiante al escenario y te dedica, agradecida, una sentidísima genuflexión, seguida de una sonrisa cómplice. El famoso escapista quita la tela que cubre un objeto y aparece tu ordenador. Introduce dentro de la pantalla a su ayudante, como si fuera una foto del Google Imágenes. Un sonido eléctrico, apenas perceptible al oído, escapa del interior de tu computadora y aparece este texto escrito en letras rojas. El escapista se gira y te mira fijamente. Estás solo. Eres su único público. Houdini toma aire y te habla lentamente, con acento austrohúngaro: “Mi joven ayudante está atrapada. Si quieres condenarla para siempre, simplemente apaga el ordenador, vete a cualquier otra página, y acabará encerrada en la oscuridad de este post para siempre. Si por el contrario, deseas liberarla, lee de nuevo este microrrelato”.
22 comentarios:
Se habrá liberado ya unas cuantas veces, porque no paro de leerlo. ¿Qué pasa, que el pozo de inspiración está en Puerto Rico?
Un abrazo.
Eso es circularidad y lo demás tonterías. ¿Por cierto, ¿cómo se sale de esta rueda de condena y salvación?
Plas, plas, plas. Me ha encantado, Manu. Pobre chica... Habrá que volver. :-)
Manu espero por su bien que pueda escaparse. Aunque quiera no puedo estar toda mi vida releyendo el micro, y eso que la idea y en sí me gustan mucho.
Un saludo.
Relato perfecto para la mirada circular de Marujita Díaz.
Bienvenido Don Espada.
Mister Sword para los amigos...
Un placer leerte.
Yo la dejaría atrapada para siempre. No es por nada, es que tengo el día sádico.
Original bucle de relato.
Besos sin escapatoria.
Es usted in-creible, Manuespada en dos palabras que una sola no le abarca.
Besos con gran sonrisa desde el aire
G E N I A L!!!
(Estoy con el día de bruja, como Lola, si siguiera mis instintos la abandono. Pero este relato me ruega una gozosa relectura).
Abrazos
Creo que algo falla.... o es que hay que releerlo siete veces y dar una vuelta a la pata coja?. muy bueno
saludillos
Pues me temo que se queda atrapada, lo he leído varias veces, pero ¡caramba! si no sale ya tengo que ir a preparar la cena.
Has vuelto potente ¿eh, Manu?
Besitos
Apago el ordenador y marcho para Madrid, :P
Besicos y cañas
Houdini hace trampa. Tal vez si lo leemos solo hasta la mitad....
Qué manera de involucrar en la trama al lector!
Me hiciste volver a leerlo completo, no me lo creo.
!Funciona! La tengo sentada a mi lado. Se rasca las pulgas, menea el rabito y dice arf, arf! Pero por lo demás es ella, la ayudante de Houdini, al fin liberada.
"...Y mándalo a cien mails distintos antes de que parpadee diez veces... ".
Muy ingenioso, Manu. En tu línea.
Besos
Y me quedo ahí, tratando de liberarla, una y otra vez.
La liberamos, claro que sí.Pero los que quedamos atrapados, entonces, somos tus lectores.
¡Excelente Manu! tú te liberas y nos dejas a nosotros en el sinfín. ¡Fantástico!
Abrazos,
Por lo que veo no soy el único que se ha quedado atrapado en esta cárcel cibernética. Yo he encontrado la salida a la quinta, pero por desgracia he salido solo.
Hola. Recién llegado. Es como si mi ordenador me hubiera llevado a ese mago que tiene una espada oxidada. Lo que pasa es que tu excelente relato es agotador, pues me obligas a leer una y otra vez y no tiene fin, quiero salvar a esa mujer, por eso, Manuel, si quieres salvarnos a los dos, vuelve a leer este comentario. (jeje)
Muy bien, Manu, muy bien. Tú también eres un mago, porque la que parece atrapada es la ayudante, cuando lo que has logrado es atrapar al lector, que se siente como el principal protagonista de la historia, por encima de Houdini y de la chica. Abrazos!!
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