3/13/2008

A MANO O A MÁQUINA


He tenido que escribir a mano un texto y me he dado cuenta de que se me está olvidando eso de trazar letras con el boli bic cristal. Nos hemos acostumbrado al ordenador. No quiero ni imaginarme lo que sería escribir un libro como "La familia de Pascual Duarte", "El Quijote" o "Las aventuras de Santi Andía" a mano. Si Cela, Cervantes o Baroja hubieran probado las bondades de la ciencia a la que siempre se mostró tan reacio Umbral (que escribía a máquina) nunca le habrían dado más vueltas a la pluma, al boli o al lápiz. Tenía que ser un horror tachar y reescribir párrafos enteros, romper páginas y volver a dibujar las ideas, como un monje amanuense de algún monasterio en la baja Edad Media. No sé ni cómo podíamos coger apuntes a esa velocidad durante la carrera. Aunque lo principal son las ideas, ahora me pregunto si Quevedo, Góngora o Juan Ramón Jiménez habrían escrito más cosas en caso de tener un ordenador.

5 comentarios:

Alberto López Cordero dijo...

Posiblemente las ventas de bolis bic hayan decaído bastante. A mí, más que preocuparme que se olvide escribir a mano, me preocupa el nivel cada vez más bajo de ortografía de los chavales de hoy gracias a inventos como el SMS y las triquiñuelas que tienen para abreviar frases que después usan de una manera involuntaria en cualquier trabajo escolar.

...flor deshilvanada dijo...

AHora que lo decís, me doy cuenta que esrcibo más rápido en computadora que a mano... no me había percatado de eso.

Lo que siempre me ha llamado la atención es como van cambiando las letras de la gente con el correr de los años, miro la letra de mi bisabuela, todo dibujada (preciosa) y la mía es tan sin gracia, tan diferente... Te has dado cuenta que los estilos de letras van cambiando con las generaciones?

Un beso, Manu!

Belén dijo...

Seguro que si habrían escrito mas cosas sin duda...

Y encima esta gente escribían a pluma! que los bolis bic siempre han sido una gran novedad :)

Besos

Mamen dijo...

Hace poco comentaba esto mismo con un amigo. Y añadí que cojo el boli con un ansia tal (como si me lo fueran a quitar...) que acabo con agujetas en la mano de tanta tensión. A él le ocurre igual.

Es el precio que hay que pagar.
Besos, Manu.

DIÓGENES dijo...

Y ya más allá del escribir, no sólo se escribía distinto, sino que se leía distinto.

Daba tiempo a que la tinta bien se secara, antes de ser leía por varias personas.

Hoy dia, leemos tanto nuestra precipitación como nuestro desentendimiento.

Otras épocas...