3/26/2008

DIBUJOS ANIMADOS


Hacía mucho que no veía dibujos animados, pero el otro día vi no sé qué dibujos japos que me dejaron pegado a la tele. Antiguamente los insultos más fuertes eran cáspita, caracoles, repámpanos. Si Filemón le tiraba un yunque de hierro macizo sobre las pelotas a Mortadelo, éste lo más que decía era: Repámpanos, jefe, me ha dolido su actitud hiriente hacia mi persona. En los dibujos manga de hoy, si alguien mira un poco mal, como de soslayo discotequero, a un cándido bebé en su cunita, el bebé le dice con los ojos llenos de odio: ¡Qué miras, maldito hijo de puta, te voy a lanzar unos rayos sobre tus pequeñas pelotas, pederasta de mierda! ¿Quién le da el biberón a ese niño? ¿Álvarez Cascos? Y pensar que nosotros nos criamos con el tierno llanto de Candy-Candy. Cada una de sus lágrimas llevaba más centímetros cúbicos que agua que el trasvase del Ebro. Por no hablar de Oliver y Benji, que tardaban tres días en llegar a la otra portería, ¡como para verte la jugada a cámara lenta! Además, hoy en día nos dicen que los treintañeros no valoramos la famila. Eso es porque hemos tenido una infancia llena de referentes extraños. ¿Cómo vamos a valorar la familia con el ejemplo de Marco y Amedio? ¿Qué tipo de familia desestructurada era aquella? El padre en los Apeninos, la madre en los Andes, y al niño ¿con quién lo dejan? ¡Con un mono! No quiero ni pensar qué ocurrirá cuando los niños de hoy tengan 30 años con los dibujos que ven. Creo que esta semana iré a ver "Espinete no existe", quizá me despeje algunas dudas.

22 comentarios:

amina dijo...

Con tu permiso,

¿Qué me dices de Heidi? la dejaron con el abuelo y la niña más feliz del mundo. Pues ahora nos culpan por esclavizar a los abuelos, pero si nos dijeron que es con quien más felices iban a ser.

No sé qué dibujos animados habrás visto, pero hay dos extremos: Los Simpson, Shin-Chan (creo que es así) y Padre de Familia. Excepto la segunda, se supone que son para adultos, igual que el manga. Miedo me da pensar cómo saldrán mis hijos viendo eso (porque lo ven a la que me descuido) pero el otro extremo casi me da pánico, ¿tu has visto Bob Esponja? ¿y los Teletubbies? Habrá que esperar años a ver qué le pasa a esa generación educados con estos muñecos subnormales; porque algunos padres nos empeñamos en que eso es más sano que ver los Simpson.

Y lo que nos quedará por ver...

P.D. Espero que mis hijos aprendan a jugar al mus en La Latina, pero que se pasen alguna vez por Libreros y hagan algo útil en esta vida.

Igual hasta nos conocemos, aunque creo que no.

Un saludo.

Manu Espada dijo...

Sí es cierto Amina, lo de heidi también tiene miga. ¿De dónde sacaba el abuelo una pensión para mantener el chalet en la sierra y a la nieta? Bueno, en Suiza deben pagar más que los 300 euros que cobra mi abuela. Y eso de Bob Esponja y los Teletubbies..., buff, casi prefiero que los niños vean manga. De todas formas yo personalmente me quedo con los Simpson, aunque es cierto que son para adultos.

En cuanto a lo de La Latina, mis amigos y yo nos pasábamos mucho tiempo allí jugando al mus con los libros sobre la mesa de la biblioteca, y la verdad es que ninguno ha salido yonki, es más, ahora están todos tan estresdados en sus respectivos puestos de señores responsables que se dan cabezazos por no haber disfrutado más aún. Yo creo que es el síndrome de Peter Pan. ¿Eres de Salamanca o estudiaste allí?

amina dijo...

Respuesta a la pregunta:

Soy, estudié y aquí me he quedado. La verdad es que es lo que se dice no tener mucho mundo. Aunque no lo llevo mal.

Yo pasé horas de Latina (no sé si llegaste a conocer la antigua) y los libros también encima de la mesa de la biblioteca. Pero nunca aprendí a jugar al mus, es mi asignatura pendiente; aunque a veces en vez de en la Latina estábamos en el Pani.

Si, ahora estresados con nuestras obligaciones, pero que nos quiten lo bailao. Eso si ¿cómo se le explica a los niños que se puede ser un poco bandarra y hasta es bueno, sin que se pasen de rosca?

Yo no tengo el síndrome de Peter Pan, de pensar que no disfruté lo suficiente, será porque la gente que me rodeaba era más responsable que yo, y yo demasiado juerguista. No era nada "madura", por tanto creo que no he llevado más que un camino lineal.

¡Quién me ha visto y quién me ve! Preocupada por los dibujos que ven mis hijos. Eso si: ¡jamás han visto los teletubbies! pero lo que es peor aún: se salieron del cine viendo Bob Esponja porque le daba miedo (creo que a mí también... era demasiado espeluznante)

Saludos

Mamen dijo...

A mi peque de cuatro años le pirra Mazinger Z. Me pasó mi cuñado unos cd´s con varios capítulos y no quiere ver otra cosa. De hecho el regalo estrella de su cumpleaños ha sido un Mazi de dos palmos que encontré en la Fnac, de casualidad. Se le caían las lágrimas a la tía de la emoción cuando lo vio.

Y ahí nos ves a las dos enganchadas al doctor Infierno, el barón Ashler y pendientes de la energía fotoatómica que le queda a Mazi para luchar.

Y a mí se me cae la baba, claro.
Besos, Manu.

Manu Espada dijo...

Amina, al Pani yo iba muchísimo, debe ser porque estudié en La Vaguada y cuando salíamos de clase nos pasábamos por allí. A lo mejor hasta nos conocemos, algo nada difícil en Salamanca. Saludos paisana.

Lula, Mazinger me encantaba, aunque también tiene su miga. Eran un poco machistas, Afrodita lanzaba los pechos, ¿y qué lanzaba Mazinger? ¡Los puños! Besos.

Mamen dijo...

Son tremendamente machistas, Manu. Si escuchas los diálogos entre Koyi Kabuto y Sayaka te dan ganas de lanzarle un pecho a Koyi (o un puño...) ;-)

Está genial verlos ahora porque esas cosas nos pasaban desapercibidas, pero está claro que esos dibujos fueron gestados en una sociedad como la japonesa, hace ya taaantos años... ;-)

Más besos.

hombredebarro dijo...

Unos dibujos buenísimos con historias realmente originales son los de Doraimon. Probad con ellos. Yo a veces he pensado en plagiarlos en el papel.
Un saludo.

hombredebarro dijo...

Unos dibujos buenísimos con historias realmente originales son los de Doraimon. Probad con ellos. Yo a veces he pensado en plagiarlos en el papel.
Un saludo.

Belén dijo...

Por dios, Marco... mi madre cuenta que despues de ver cada capítulo íbamos los cuatro a llorar en sus piernas diciendole que no se fuera!

Y Candy? en el primer episodio va y se le muere el novio... joe...

Creo que ya entiendo porque voy a psicólogo...

Besicos ;)

amina dijo...

Menudos chistes se hacen ahora con los famosos puños de Afrodita. No los he vuelto a ver, pero hay cosas que si, que pasan desapercibidas cuando somos niños. Yo recuerdo que prefería jugar a los Angeles de Charlie en vez de a Mazinger Z.

Pero sin duda, a mi me dejó marcada Heidi, será por no tener abuelo con chalecito en la sierra, ji, ji.

Pues si, Manu, si estudiaste en la Vaguada serás paisano mío. He leído algunas de las entradas de tu blog y se te nota por qué ibas al Pani, así que no pongas disculpas tontas. También he descubierto que no tienes hijos, y reconozco que a los que no los tenéis os debe cansar una barbaridad lo que hablamos de ellos los que los tenemos. Pero tu has sacado el tema de los dibujos animados.

Yo creo que empecé a dejar de verlos con David el Gnomo, qué cansino era aquel enano!!!

Me ha encantado tu post de las tribus. Y una pregunta, ¿el libro son relatos?

Vale, no contestes, por diez miserables euros lo compro y me entero. Tiene pinta de ser divertido.

amina dijo...

No me suena lo de Candy pero uno de los últimos éxitos de dibujos animados, Nemo, empieza con más desgracias que las de la protagonista de Los Pilares de la Tierra. Primero se le comen a la madre y a todos los hermanos, el padre se tiene que hacer cargo del hijo que le queda que encima es el lisiado y hala! una plasta histérica que se le pega, tiburones, dentistas... vamos, que no falta un detalle para ser una peli de las de antena 3; si, un detalle: que es en dibujos animados.

Ah, saludos.

Manu Espada dijo...

Hombre de barro, intentaré hacerme con los dibujos que dices.

Amina, sí, me has pillado, iba al Pani porque sí, no porque estudiase en la Vaguada. Mira que nos gustaba ese sitio tan cutre a los de la pandilla, la de veces que se cayó un amigo mío por esas escaleras tan empinadas. En cuanto al libro, sí, es un libro de relatos. En el libro hay dos etapas, una que contiene relatos muy cortitos de la época en la que trabajé en Radio 3 y unos relatos más largos de una época más reciente. Hay de todo, algunos con un tono más humorístico y otros con un tono más oscuro. Precisamente el mes que viene voy a la universidad Pontificia a dar una charla a los alumnos sobre este libro y alguna que otra cosilla. Besos.

Manu Espada dijo...

Belén, qué tristeza lo de ir toda la familia a llorar, por dios, esos dibujos crearon más traumas que la muerte de Chanquete. Besos.

María dijo...

Pues a mí me encantaba Heidi, siempre que veía esos dibujos acababa llorando, porque esos dibujos estaban hechos a flor de piel con tanta sensibilidad, con una niña que transmitía tanta dulzura. También, después, hicieron una película de esos dibujos, y cuando la he visto tres veces en la tv, las tres terminé llorando a estas alturas, con 40 años jajaja, ahora, en cambio... ¿que ven nuestros hijos? Shin Chan, los Simpson, Padre de familia, etc ¿dónde está la sensibilidad? si lo que hacen es decir palabrotas o terminan pegándose.

Gracias por hacernos recordar aquellos años de nuestra infancia o adolescencia.

Un abrazo.

Alberto López Cordero dijo...

También dicen que Epi y Blas eran homosexuales. Pero yo recuerdo perfectamente que cada uno dormía en su respectiva camita que tenía en el cabezero la inicial E y B (Ernie y Barnie que son los nombres originales en Ingles.)

Manu Espada dijo...

Alberto, lo de Epi y Blas es un clásico, más de 8 años viviendo juntos en ese apartamento y no se han llevado a ninguna teleñeca, ¡ni a Peggy, que era una guarra!

amina dijo...

Manu, casi estoy por tomármelo como una invitación. En todo caso, es posible que vaya si me entero de día, hora, lugar, etc.

Buf!, cuando se pone uno a hablar cosas del pasado se da cuenta de la edad que tiene. Ayer al quitarles la tele a mis hijos para que dejasen de ver dibujos animados debí decir alguna chorrada porque me empezaron a preguntar por los que yo veía de pequeña. Una hermana mayor que yo les había hablado de Viky el vikingo (explotación infantil, porque era el único niño en el barco con los mayores, ¿para qué lo querrían?) y de un pollito... ah! Calimero, del que apenas recordaba nada. Ellos me contaron lo que les había contado su tía y yo me di cuenta de que somos de la misma generación pero unos pocos años de diferencia se notan en la memoria.

Y ahora leo que a algunos estos dibujos os recuerdan a vuestra adolescencia... Dios Mío! qué mayor soy!

Y "hombredebarro" me suena a una canción de unos dibujos que cantaban mis hijos, ¿puede ser de esa serie de la que hablas? Yo creo que les entendía "hombre de barro fongore..." Claro, que vaya usted a saber qué entendían ellos.

El tema de los dibujos animados, sobre todo las peliculas de Disney está muy estudiado... ya sabeís lo que dicen de Blancanieves con los 7 enanitos, el "desliz" de una de las adoradoras de Hércules, etc.

Manu Espada dijo...

Amina, yo creo que Vicky el Vikingo se metía algo, tanto llevarse la mano a la nariz. Por no hablar de Pipi Lanstrung, cuando no estaba con el mono estaba con el caballo. ¿Y los colocones de Astérix y Obélix con la pócima? Sin olvidarnos de la Bella Durmiente, que se picó con la aguja de un uso, ¡una sobredosis que la dejño en coma! En cuanto a la charla es el 16 de abril, pero no sé la hora ni si dejarán entrar a los que no sean alumnos de periodismo. Es la primera vez que voy a algo así.

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Dime ¿cuales ves mejor, los manga o los tipo "Heidi" y compañia? A mí me gustan mucho los dibujos (otra cosa es que tenga tiempo para verlos), pero dar a los niños violencia, mala educación y ningún valor humano a cambio.... ufff, no sé, que difícil me lo pones.
No sé, pero cuando salía la gallina caponata y todos los de barrio sésamo, creo que al menos enseñaban.
Saluditos.

Benjuí dijo...

Buah, sois todos unos yogurines.
A mí me criaron en la postguerra con historias absolutamente espeluznantes de Jesucristo llevándose latigazos y clavado en la cruz y todo eso, y el otro extremo eran madrastras sádicas que intentaban cepillarse a la Blancanieves.
Luego vinieron el ratón Mickey, y Tom y Jerry, que se pasaban el día haciéndose putadas, toda la violencia del mundo. Y el Correcaminos, que para qué os voy a contar.
Lo de Heidi y Epi y Blas me lo tragué enterito mientras criaba a mi hijo. Heidi era una babosa, pero qué remedio.
...Un día mi hijo se puso a ver "Barrio Sésamo" mientras yo le preparaba la merienda, y se encontró con el 23-F. Tenía cinco años y no se le ha olvidado.

Manu Espada dijo...

Nani, la verdad es que ni Heidi ni los mangas, a mí me gustaban más de aventuras, tipo Willy Fog, Dragones y Mazmorras o Dartañán y los tres mosqueperros, pero también me encantaba Espinete y Barrio Sésamo en general.

Benjui, yo debía tener esa edad también cuando lo del 23F y tampoco se me ha olvidado.

Ana Ortiz dijo...

Yo adoraba Heidi, pero creo q ella cuando la lastimaban con lágrimas en los ojos apretaba los dientes, se mordia el labio y no decia nada...
Cómo cambian los tiempos.