4/27/2009

MOHO


Hoy os dejo el micro de otro amigo, Ernesto Ortega, que ha ganado con este texto el concurso de micros de la biblioteca de Cuenca.


Moho
Al entrar en casa, noté un olor agrio. Tiré la americana sobre el sofá y fui a la nevera. Todavía no me había acostumbrado a hacer la compra para mí solo y siempre me sobraba comida que acababa pudriéndose. Además, cada vez salía más tarde de la oficina y, cuando llegaba a casa, me daba pereza cocinar. Prefería tomar unas tapas en cualquier bar. Husmeé en el cajón de las verduras: los tomates tenían buen aspecto y la lechuga aún estaba fresca. Inspeccioné los tuppers, me llevé un filete de pollo a la nariz, olfateé los restos de una lata de tomate que llevaba tres días abierta. Todo parecía en perfecto estado, pero un hedor me perseguía por el piso. Fue en el cuarto de baño, con la ducha abierta y la ropa por el suelo, cuando me di cuenta de que una fina capa de moho cubría mi cuerpo.

12 comentarios:

Araceli Esteves dijo...

Muy bueno, sí señor, se merecía el premio.

Raúl dijo...

Pues no conozco al resto de participanetes, pero el micro seguro que no desmereció el galardón que le otrogaron, Manu.

Javier Puche dijo...

Está muy bien, sin duda. Una imagen poderosa la del moho sobre la piel. Felicita a tu amigo Ernesto.

Sinuosa dijo...

Con ese título empiezo a leer buscando el moho, anticipándo dónde está, y aún así me sorprende el lugar. La imagen es impactante.
Felicidades a tu amigo.

Anónimo dijo...

Felicîtalo también por mî, pero me gusta, muchîsimo màs, el de abajo.
;)
Un beso.

pepa mas gisbert dijo...

Y este moho además es más difícil de erradicar, no podemos tirar lo que cubre a la basura, o si.

Saludos

Alberto López Cordero dijo...

Estupendo microrrelato. Supongo que será en la soledad del hogar donde huelen todas nuestras miserias internas.

Esencia de Nebulosa dijo...

Inesperado lugar. Nunca se sabe donde se puede llegar a enmohecer. Contundente. Felicidades a Ernesto.

mati dijo...

pobre.. se estaba pudriendo sin saberlo.. eso es lo peor, no saberlo jjajaja
un besazo, buen relato el de tu amigo

Mr Blueberry dijo...

Jejejeje, a veces en vez de olvidarnos los tomates pudriéndose en la nevera, nos olvidamos de que los que nos pudrimos somos nosotros...

Me ha pasado alguna vez

Abrazotes

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Jejeje, a veces somos nosotros los que nos pudrimos. Es igual que cuando le vemos los defectos a los otros y no vemos los propios.
Felicita a tu amigo.
Besicos muchos.

Susana Peiró dijo...

Enhorabuena al autor!

Buen texto!

Mi Abrazo para Vos, Querido Amigo!