El vigilante del fiordo, de Fernando Aramburu (Tusquets)
Conversación, de Gonzalo Hidalgo Bayal (Tusquets)
Los caníbales, de Iván Humanes (Libros
del Innombrable)
Historias
de un dios menguante, de José
Mateos (Pre/Textos)
Hacerse
el muerto, de Andrés Neuman (Páginas de Espuma)
El
libro de los viajes equivocados,
de Clara Obligado (Páginas de Espuma)
Calle
Aristóteles, de Jesús Ortega (Cuadernos del Vigía)
Geometría
del azar, de Fernando Palazuelos
(Baile del Sol)
Habitaciones
privadas, de Cristina Peri Rossil
(Menoscuarto)
Esquina
inferior del cuadro, de Miguel A.
Zapata (Menoscuarto)
Este año no se ha colado ningún libro de microrrelatos y solo he leído unos poquitos de los 10 finalistas, así que en esta ocasión no participaré en la quiniela, al menos no hasta que los lea todos. Solo diré que echo de menos algún que otro libro que se merecía estar en la final, pero no hay sitio para todos. Que gane el mejor.
8 comentarios:
Yo también los echo de menos, Manu.
Besos y abrazos suavecitos.
Pues sí, aunque por supuesto sólo he leído algunos. Respecto a la ausencia de libros de micros, no estaría mal - como ya te he oído en alguna ocasión - que se estableciera un premio anual al mejor libro del género editado. Nada mal.
Abrazos.
Agus, si consiguiésemos un patrocinador que pusiera el premio al estilo Ribera del Duero puede que pudiésemos organizar ese concurso, pero tal y como están las cosas no creo que ponga un duro nadie, Sería cuestión de llamar a puertas, pero para eso hay que tener tiempo, quizá alguien se anime.
Un abrazo.
Lola, un abrazo fuerte para ti también.
Que gane el mejor o el que crean sea el mejor...
Besos desde el aire
Pues yo tampoco he leído muchos de estos diez.
En cualquier caso, creo ue haría falta una mayor defensa del género por las -pocas, muy pocas- editoriales que apuestan por él.
Estoy contigo en que no corren buenos tiempos para pescar patrocinios, Manu, pero supongo que tampoco sería necesaria una dotación exagerada. Lo que sí tengo claro es que el primero que se atreva se llevará ese gato al agua y por poco dinero.
Un abrazo.
He leído los de Página de Espuma y Menoscuarto. Tengo pendiente el Vigilante del Fiordo y ...puedo decir que son ¡muy buenos! o a mí me lo parecen. Creo que llegan, que se leen, que son portables, manejables y leíbles. Y coincido en lo que dices, en ese echar de menos.
Besos.
¡Yuhuuu!
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